2 febrero 2021

“Trabajamos con los niños los valores de un buen deportista sobre el terreno de juego para que luego lo trasladen al terreno más importante: al de su vida”.

En Phuket, Tailandia, llevamos a cabo nuestra labor junto con tres escuelas y centros de integración que acogen a más de 95 niños en riesgo de exclusión social, de entre 10 y 17 años. 

Aunque con un mismo espíritu, el proyecto en Phuket tiene diferencias respecto a nuestro trabajo en Pan Bendito, Madrid. La situación social y cultural en Tailandia es diferente a la de España y, por tanto, la infancia y la juventud se enfrentan a otro tipo de obstáculos. Nosotros estamos allí para ayudarles a superarlos. 

Además de ayudarles a desarrollar cualidades y a adquirir valores, como los que ofrece el fútbol, les facilitamos apoyo escolar, formación en idiomas y preparación para el mercado laboral. 

Para ello, contamos con un equipo técnico propio del que forma parte nuestro entrenador tailandés, Roro Petsiri. Hoy hablamos con él para que nos cuente con mayor profundidad por qué Gate Of Football debe estar en Tailandia. 

¿Cuál es tu labor en Gate Of Football?

Trabajo para Gate Of Football desde hace más de dos años. Realizo todo tipo de labores que son necesarias en la fundación pero mi responsabilidad, fundamentalmente, se basa en ayudar a desarrollar y entrenar con los menores sus habilidades futbolísticas, además de ocuparme de todas las labores de coordinación entre los padres, los niños y la escuela con la que colaboramos. 

Desde tu posición como entrenador, ¿cómo crees que el fútbol puede ayudar a los niños y niñas tailandeses a mejorar sus vidas? 

El fútbol les ayuda a alejarse de las drogas. A otros les ofrece la posibilidad de encaminarse hacia una carrera deportiva. Por otro lado, el fútbol se convierte en una herramienta que les ayuda a socializar e interactuar con otras culturas. 

Este deporte les da la oportunidad de tomar un camino más saludable en la vida, alejándolos de todo aquello que pueda entorpecer sus vidas y su capacidad para crecer y transcender personal y profesionalmente. 

¿Cuál es la situación actual de los menores con los que trabajáis? 

En la actualidad, los niños y niñas del proyecto en Tailandia se están adaptando a esta nueva situación de la COVID-19. El fútbol les ha servido como una vía de distracción y evasión de los problemas que han tenido que enfrentar en sus vidas en los últimos meses. Debido al virus, sus familias han vivido momentos muy difíciles para cuidar de ellos, por ejemplo, algunos padres no podían estar con sus hijos porque tenían problemas laborales. 

¿Por qué crees que es importante la presencia de Gate Of Football en Phuket? 

Creo firmemente que la fundación es muy necesaria en la isla por varios motivos. Hay muchos niños y niñas que viven en una situación de pobreza, menores que se merecen tener la oportunidad de vivir una vida mejor. Gate Of Football les ofrece a estos niños y niñas la oportunidad de crecer tanto a nivel personal como a nivel académico. 

Asimismo, el fútbol les enseña a tener un buen espíritu deportivo. Un buen deportista es alguien que puede manejar las dificultades que se le presentan con confianza. Por eso, trabajamos con ellos los valores de un buen deportista sobre el terreno de juego para que, luego, lo trasladen al terreno más importante, al de su vida. 

También aprenden la importancia que tiene el trabajo en equipo y mejora su autoestima y confianza en sí mismos cuando ven los resultados de su esfuerzo. El deporte, en general, les enseña a los niños sobre la autodisciplina.